Si últimamente te has dado cuenta de que tu equipo está desmotivado, que ya no cumplen con los objetivos de ventas o productividad como antes y, sobre todo, no sabes cómo remediar esta situación, quizás tu equipo esté sufriendo de burnout.
El homeoffice, la pandemia y los cambios en el panorama económico del país han ido generando un ambiente de ansiedad y estrés en nuestros equipos de trabajo, tanto en los equipos de ventas como en otras áreas. Si bien es cierto, algunos rubros han crecido exponencialmente, otros han sufrido recesiones. En ambos casos, los equipos se han visto sobrecargados de trabajo y esto puede traer algunas consecuencias en tus colaboradores.
¿Qué es Burnout?
El burnout es la sensación de agotamiento o cansancio excesivo producido por el estrés laboral. Suele afectar de forma emocional y física a las personas que lo padecen. Es conocido como el “síndrome del trabajador quemado”, lo que hace referencia a la cronificación del estrés laboral.
Algunos de los síntomas son el estado de agotamiento físico y mental que se prolonga en el tiempo y llega a alterar la personalidad y autoestima del trabajador. Son síntomas similares a la depresión, pues produce malestares físicos, disminución en la motivación e involucramiento en el trabajo, entre otros.
También es un proceso en el que progresivamente el trabajador sufre una pérdida del interés por sus tareas y va desarrollando una reacción psicológica negativa hacia su ocupación laboral.
Síntomas del síndrome de ‘burnout’
1. Agotamiento físico y mental
El trabajador sufre una pérdida de energía en todos los niveles de salud:
Señales de agotamiento físico:
- Fatiga crónica
- Aumento de peso o pérdida de apetito.
- Alteraciones psicosomáticas como dolores musculares, migrañas, problemas gastrointestinales y, en el caso de las mujeres, desregulación del ciclo menstrual.
Señales de agotamiento mental:
- Estrés
- Ansiedad
- Trastornos adaptativos
- La depresión
- El insomnio
2. Despersonalización y cinismo
3. Descenso en la productividad laboral y desmotivación
¿Cómo prevenir el burnout en tu equipo?
Veamos algunos consejos para ayudar a tu equipo a lidiar mejor con el estrés y ayudar a prevenirlo
Aprende a leer las señales
Muchas veces nos rodeamos con nuestros compañeros y equipos asumiendo de forma automática que el bienestar emocional es inherente a cada uno de ellos. Sin embargo, ignoramos las dificultades que cada uno de ellos esté afrontando cada día.
Es por ellos, que es indispensable establecer mecanismos que permitan el diálogo y establecer confianza con sus jefes inmediatos para ayudarlos a gestionar de mejor manera el estrés aun cuando sus resultados sigan siendo excelentes.
Busca ayuda de profesionales
Para lograr establecer un cambio real determinante para tu equipo es necesario contar con la ayuda de especialistas que logren establecer las áreas de mejora, así como herramientas de comunicación, inteligencia emocional, escucha activa y mejorar a los líderes de cada equipo.
Además, es necesario comprometer a cada miembro del equipo en la ejecución del plan y establecer nuevas formas que ayuden a medir la efectividad de las acciones implementadas. Para ello, es importante realizar encuestas de satisfacción, evaluaciones de bienestar y psicológica
Aprende a frenar el ritmo
Del otro lado de la experiencia se encuentra Regina Athié, cofundadora y CEO de Cuéntame, una consultora que se encarga de asesorar a empresas sobre salud mental y quien sí atravesó por un episodio de burnout.
«En 2021, me di cuenta de que sí tenía burnout porque tenía muy poca energía. Hasta las juntas con clientes me agotaban, desde la planeación de las mismas», dice.
Otro síntoma que identificó fue que, al estar más irritable, su trato a la gente que le rodeaba era muy rudo y su paciencia se redujo a niveles complicados para la dinámica laboral.
Athié llevaba un largo periodo sin tomar vacaciones y, tras detectar que empezó a sufrir ataques de pánico, decidió tomar un periodo de descanso.
«Aprendí que las personas funcionamos como un motor: si no frenas, si no haces pausas, el motor se va a quemar y eso fue lo que me pasó», dice.
A partir de ello visibilizó la importancia del descanso para su equipo de trabajo aplicando jornadas más flexibles que se denominaron días de salud mental (un día libre cada 15 días, adicional a los descansos).
Sumar a todos a las pláticas
Aunque una líder de equipo sea consciente de la importancia de cuidar la salud mental propia y de su equipo de trabajo, a veces no será suficiente para realizar cambios sustanciales en las dinámicas de trabajo. Por ello, la sensibilización sobre estos cuidados debe permear desde las cúpulas de decisión en cada empresa a cada área de la misma.
«Durante la pandemia se acercaron varias empresas que nos pidieron asesoría porque miembros de los consejos de las compañías donde trabajaban les empezaron a pedir reportes mensuales sobre cuántas personas de sus equipos tenían burnout y sobre cuántas recibieron algún tratamiento», explica Athié.
Abrir canales de confianza
El burnout no siempre se origina por motivos laborales, pero siempre se manifiesta en esa esfera. Y para la emprendedora, esa es razón suficiente para establecer canales seguros, en términos de confidencialidad y confianza, para que colaboradoras y colaboradores se puedan acercar con cualquier líder de equipo a exponer situaciones que le provoquen angustia y un estado de malestar prolongado.
Anticípate a un estado de agotamiento
Jacqueline L’Hoist, directora de la Unidad de Género de Grupo Salinas, cuenta que, aunque la pandemia fue un hecho sin precedentes y que nadie podía prever el alcance y las consecuencias que tendría, se apuró a proponer talleres que dieran contención emocional a quienes lo necesitaran, no sólo mujeres.
«En 2020 le propuse que todas las personas que tuvieran equipos que tomaran conmigo talleres para resolver conflictos internos como hostigamiento laboral, carga laboral, pero también otros temas personales como el miedo ante la incertidumbre de algo que nadie de nosotros había pasado jamás. Creo que fue de gran utilidad porque con el home office hasta hablamos de cómo evitar el mobbing laboral [el acoso laboral por parte de jefes o compañeros de trabajo]», contó.
Para ella, el acierto fue doble: los talleres se aplicaron desde el inicio, mucho antes de que se vieran los efectos del burnout, y que se aplicaran a todos los colaboradores, por igual, pese a que la capacitación salió de la Unidad de Género.
«Al final, estos colaboradores regresaron a sus casas y pudieron incluso dar contención a sus parejas o a sus familias enteras», dice.
¿Por qué las mujeres padecen burnout?
Aunque el burnout puede afectar tanto a hombres como mujeres, usualmente son ellas las que pueden padecerlo con mayor frecuencia.
Esto, debido a las responsabilidades que conllevan la maternidad y las tareas del hogar, ya que dedican 43 horas semanales, en promedio, a tareas del hogar y cuidado no remunerado; 2.3 veces más que los hombres, según cifras del año pasado de la organización México Cómo Vamos.
A ello hay que sumar el estrés laboral que representa para muchas mujeres mantener su puesto o sus ambiciones por crecer profesionalmente.